viernes, 1 de noviembre de 2019

Los rastros de lo que fuimos



No sé dónde están tus cenizas, dónde el polvo en que te convertiste. Sé en dónde está enterrado tu ombligo. ¿Para  qué quiero el rastro de tu muerte? Me quedo con el rastro de tu vida.

 Hoy te vine a visitar a este parque y me siento bajo este árbol que te guarda celosamente entre sus raíces. 

En mi corazón yo guardo tu corazón.




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